Ramos Mejía, Argentina .- El joven que asistió armado a la Secundaria N°6 Félix Bogado de Ramos Mejía el viernes pasado seguirá en la escuela. Lo confirmó el presidente del Consejo Escolar de La Matanza, Alejandro Schvartzman, quien agregó: “Por ahora no está en condiciones de volver a clases. Y recibe tratamiento psicológico”.
Tras el shock que provocó la decisión del adolescente de 14 años de entrar armado al colegio y amenazar a través de las redes con “Voy a matar a todos”, la escuela busca volver a la normalidad. Ayer hubo una reunión con algunos padres para comunicar lo
sucedido e informar los pasos a seguir.Tras el shock que provocó la decisión del adolescente de 14 años de entrar armado al colegio y amenazar a través de las redes con “Voy a matar a todos”, la escuela busca volver a la normalidad. Ayer hubo una reunión con algunos padres para comunicar lo
La reunión permitió también hablar de un tema paralelo que preocupa: las amenazas de bomba. La Escuela 6 recibió dos intimidaciones el lunes y martes, por lo que recién ayer retomaron las clases.
El equipo de orientación escolar buscó llevar tranquilidad a los chicos que “ya no quieren ir más al colegio”, comentó Silvia Castelletti, una mamá de la escuela. Y agregó: “Les dijeron a los chicos que quizás cuando el nene se reintegre, lo haga con un acompañante terapéutico”.
El viernes, un estudiante de 14 años de tercer año no llevaba útiles ni cuadernos en su mochila: en su interior tenía dos armas cargadas y un cuchillo. Llegó al colegio con la intención de cometer “una masacre” y terminar con su vida. Así lo hizo saber a través del 911: “Estoy armado, voy a matar a todos y seguramente me voy a suicidar”, dijo a una operadora.
Tras el aviso, se hizo presente en el establecimiento de Pueyrredón 1250 el subcomisario Solís, de la comisaría de Lomas del Millón. El personal policial procedió a sustraer las armas y tomó declaración a la madre y el padrastro, dueño del armamento. “El hombre tenía autorización para la portación de armas, que quedaron secuestradas”, explicó Diego Lorenzo, jefe de calle.
La causa quedó caratulada como “Tenencia ilegal de armas y munición de guerra” y ahora está a cargo de la UFI N° 2 de La Matanza. El lunes, el menor se presentó a declarar pero no trascendieron datos del testimonio.
Cuando los oficiales llegaron se suspendió el recreo y el director, Miguel Angel Racco, fue a buscar al chico al patio. “Pude hablar con el director. Me dijo que el nene se sentó sin problema junto a él y a un preceptor y se largó a llorar. Muy angustiado, les contó y en ningún momento se resistió a que le revisaran sus cosas”, contó el presidente del Consejo Escolar.
El colegio de Ramos Mejía dicta clases en dos turnos y además, funciona un superior nocturno. El chico, que cursa tercer año del secundario, había subido videos a las redes sociales mostrando las intenciones de hacerse daño y cometer un delito grave.
Fuente: Clarín.-
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